lunes, 16 de noviembre de 2015

30 AÑOS CRISTIANO NACIDO DE NUEVO




30 años no son nada 
¿o sí? 
Para Dios es poco tiempo pero para un mortal..., claro que es mucho. 
Un 15 de noviembre de 1985 acepté a Cristo como Salvador y nací a una nueva vida en Cristo

El pastor de origen chileno Nelson Ortiz y el misionero norteamericano Holmes abrieron sus Biblias en la pequeña sala de estar de la casa pastoral del Templo Cristiano, perteneciente a la Unión Evangélica Argentina, en San Antonio Oeste, provincia de Río Negro y leyeron tres versículos: Juan 3:16, 1 Pedro 2:2 y Apocalipsis 3:20. Luego, el misionero Holmes con fuerte acento extranjero, me preguntó mirándome a los ojos: -¿Quieres aceptar a Cristo como Señor y Salvador? Y yo respondí: -Sí.

Por supuesto. Hubo un proceso antes de la conversión. Esta no fue espontánea sino que requirió de un tiempo. Creo que más de un año. Siempre comento que yo navegué un tiempo breve en barcos pesqueros. En una de estas embarcaciones llamada "Don Valentín" conocí un patrón llamado Miguel "negro" Rodríguez quien, en sus ratos libres, leía profusamente las Escrituras. Cuando me tocaba hacer timón, solía encontrarlo leyendo en voz alta porciones de la Biblia. Dios iba preparando mi corazón para el momento decisivo.

A bordo del pesquero "Don Valentín"
1984

También es justo reconocer la influencia de mi madre. Ella era protestante y su padre había sido pastor evangélico. Ella no hablaba mucho de su vida cristiana porque había sufrido muchas humillaciones por no ser católica. Recordaba, por ejemplo, que le gritaban "hereje, hereje" cuando iba a la escuela y que, durante el velorio de una parienta, le fue negado el acceso porque eran "moros". Una forma despectiva de llamar a quienes eran diferentes en Argentina. Vale remarcar que esta discriminación ha dejado de existir por la gracia de Dios. Hoy, los protestantes en Argentina, gozamos de libertades nunca imaginadas.

Mi madre Susana
Gustaba salir a caminar
Amaba la literatura  y la naturaleza
Mujer trabajadora y amable y de gran corazón

Mi madre adoptiva (en efecto, soy adoptado) llevó toda su vida esta carga en su corazón. Aún así, siempre estuvo atenta a mi educación espiritual. Como buena hija de la Reforma, me enseñó a leer y escribir de modo que, al ingresar al colegio primario, no sólo leía sino que escribía bastante bien. También me inculcó amor por los libros. Tenía una enorme colección de novelas y revistas de historietas y fotonovelas.

Susana y Roberto Pesaresi
1954
Fue un matrimonio en yugo desigual
pero Dios los unió años más tarde, en una misma fe.
Nunca le pregunté a mi madre el porqué de su determinación
Fueron excelentes padres adoptivos que llevo constantemente en mi memoria
y corazón.
Vivieron 53 años de casados hasta que mi padre,
ya converso, partió a la presencia del Señor.
Ella lo siguió seis años después

Mi vida como cristiano nacido de nuevo no fue ejemplar por muchos años. Anduve más afuera de las cosas del Señor que dentro de los intereses del Reino. Cuando me convertí tenía 22 años de edad y mi familia era mixta en cuanto a lo religioso. De parte de madre, como dije antes, tenía tradición cristiana evangélica ya que mi abuelo materno  a quien nunca conocí, fue pastor. (De parte de padre, todos eran católicos. Mi padre recién se convertiría a Cristo a tres años de su fallecimiento. Puedo decir que, entró en la presencia del Señor, a último momento. Siempre había sido terco y llevó años de oración lograr que un día, pensara en lo conveniente de oír las buenas nuevas del Evangelio). El Señor me arrimaría al rebaño haciéndome pasar por una sucesión de pruebas muy duras. Entiendo que era su modo de ayudarme, disciplinando, porque al aferrarme a él en el dolor, todo convergió para mejor. Ahora no falto un día a las reuniones en el templo y no pienso dejar de servir nunca más.

En Puerto del Este
Punta Villarino - Río Negro
Argentina

Cuando tenía unos 33 años de edad, aproximadamente, el misionero norteamericano Darrell Morán -pastor de una iglesia en el barrio Parque Patagonia de Bahía Blanca donde me congregaba por entonces- me preguntó si quería servir en la iglesia del Señor Jesucristo. Mi respuesta fue una necedad que hasta el día de hoy lamento. Respondí: -No pastor, muchas gracias. No quiero problemas en mi vida. 

Si hubiera imaginado que mi vida luego de esa respuesta, tuvo más problemas que nunca, seguramente me habría refugiado en el servicio al Señor Jesús y no estar errante. Entonces pensaba, que se podía vivir con un pie en el mundo y otro dentro del Reino. Tonto error que pague caro.

¿Cómo me encuentro hoy? Convencido que, por fuera de Cristo, es imposible vivir una vida victoriosa. Son tantos los problemas, la persecución física e intelectual, los desafíos emocionales, que sin Jesús, a nada llegaríamos. He aceptado que la vida que se nos viene encima será difícil en extremo.

Hoy nada me aparta del servicio a Dios. Acabaron los tiempos de las dudas, idas y venidas. Hoy, mi futuro es hacer la voluntad de mi Creador y lo demás no es nada.Y si llega la maldad sobre mí, ya tengo un instructivo en la Biblia que seguir y una fe que me vincula al ser Todopoderoso creador de todo cuanto existe.

Estoy más que seguro que Dios nunca nos va a abandonar aunque a veces gritemos a pura queja, como Job, en el capítulo 7 del libro que lleva su nombre. Estamos para servir y sufrir y todo, sin ver ya que por fe andamos con la convicción que, al final de todo, alcanzaremos a ver a Dios. Saludos y muchas gracias por leer.


Marc Pesaresi
15 de Noviembre de 2015
San Antonio Oeste, 
provincia de Río Negro

_______________________________________


30 years as a Christian.  I did born again
30 years are nothing
Or  yes?
To God it is little time but to the mortal…... of course it is too much.
In November 15th 1985 I did accept to Christ as my Savior and I did born to a new life in Christ

The pastor from Chile named Nelson Ortiz and the missionary from North America Holmes opening their Bibles in the little living room of the Shepherding house of Christian’s Temple, belonging to the Evangelical Union of Argentina, at San Antonio Oeste, province of Rio Negro and they read three verses : John 3:16, 1st Peter 2:2 and Revelation 3:20. After that, the missionary Holmes with strong foreign accent, He asked me looking at the eyes: Do you want to accept to Christ as your Savior and Lord? I did answer: Yes.

Of course. There was a whole process before the conversion. This one it was not spontaneous but it required of time. I think, it was more than one year. I always commented that I did sail for a little period of time in fishing ships.  In one of this embarkation named “Don Valentin” I knew one chief called Miguel “negro” Rodriquez who, at his break time, he read the Scriptures profusely. When I had to take the helm, I used to found him reading aloud some parts of the the Bible. God was preparing my hearth to the decisive moment.

It is also fair to recognize the influence from my mother.  She was protestant and her father was evangelical pastor. She did not talk too much of her Christian life because she had suffered so many humiliations for not being catholic. She recalled, as example, that the people screaming at her “heretic, heretic” When she was at school and during the funeral of one relative, it was denied the access to it because they were “Moor”. It is a pejorative way to call to somebody who is different in Argentina. It is important to re-mark that this discriminations does not exist anymore, thanks to God. Today, the protestant in Argentina, We enjoy the liberty as we never thought before.

My adoptive mother (In fact, I am adopted) she did bring all her life with this load in his heart. Even so, she was always attentive to my Spiritual education. As a good daughter of the Reformation, she taught me to read and write so that, at the moment to begin the school, not only read but write so well. She also did instill in me the love for the books.  She had a big collection of novels and magazine of histories and some novels of romance or crime story illustrated with photos.

My life as a Christian, born again, it was not exemplary for long time. I was for more time out of the word of God than inside of them.  When I accepted to Christ I was 22 years old and my family it was mixed related to the religious things. From my mother side, as I mentioned before, She had Evangelical Christian traditions since my grandfather to whom I never met, he was pastor (From my father side, all of them were Catholics.  

My father became to Christ just three years before he died. I can say that he get at the presence of the Lord at the last moment. I had always been stubborn and it took years of pray to get that one day, to think of the convenient of earing the good news of the Gospel). The Lord took me to the flock through several hard tests. I understand that it was his way to help me, disciplining, because when I took refuge in him in the painful moments, everything   converges to be better.  Now I did not miss any day to the reunion at the church and I did not think to leave to serve any more.

When I was 33 years old, approximately, the North American  missionary Darrell Moran – Pastor of one of the church in the neighborhood Parque Patagonia de Bahía Blanca where I did congregate at that moment he asked me if I want to serve to the Church of the Lord Jesus Christ. My answered was a complete denial that at this moment I am sorry for it. I answered: - No  pastor, thank you so much. I don’t want problems in my life.

If I had imagine that my life after that answer, it had more troubles than ever, surely I would refugee in the Lord Service and not been wandering. So I thought that I can live with one foot inside the world and other one inside the Reign. It was a fool mistake that I pay dearly for it.

How am I right now?  I am convinced that, out of Christ, it is impossible to live a life in victory. There are so many problems, the physical pursuit and intellectual, the emotional challenges, that without Jesus, we cannot get anything. I have accepted that the life that we will face it has a lot of extreme difficulties.

Now nothing can separate me from the Lord Service. The time for doubt already finish, go and come. Now, my future is to make the will of God and the rest is nothing. And if the evil intention came over me, I already have one instruction in the Bible to follow and one faith that bind me together to the one the Almighty the one who create all that exist.

I am pretty sure that God never let us even though we scream only complains, as Job, in the chapter 7 in the book that has his name. We are to serve and to suffer everything, without seeing because we walk by faith with the conviction that, at the end, we reach to see God. Greetings and thank you so much for reading.


Traducción
Carolina Alfaro
15 de Noviembre de 2015





No hay comentarios.:

Publicar un comentario